Refugio María e Alberto ai Brentei.
Detrás Cima Tossa y el Crozzon de Brenta
Los Dolomitas de Brenta son un pequeño y complejo grupo de montañas perteneciente a los Alpes Réticos, situado en la provincia de Trento, en el norte de Italia. Aunque separado geográficamente de los Dolomitas, se considera ligado a dicha área alpina por el tipo de roca común (dolomía y caliza), cuya erosión da lugar a relieves extraordinariamente recortados que se alzan sobre valles cubiertos de bosques y prados. De hecho, la Unesco lo incluyó en el año 2009 entre los grupos de Dolomitas declarados Patrimonio de la Humanidad. Pertenecen, también, al Parque Natural Adamello Brenta. El techo del grupo es la Cima Tosa (3173 m).
Es un paraíso para la escalada, con prestigiosas vías, y para el recorrido de ferratas, algunas muy complejas. Además de una zona preparada para el senderismo de todos los niveles: desde los valles salen sentieros numerados y bien señalizados que llegan a refugios y pasos. Atravesando el macizo y con el apoyo de refugios centenarios, se ha diseñado un sendero de largo recorrido (Dolomiti di Brenta Trek) y una ruta ciclista (Dolomiti di Brenta Bike).
Refugios Brentei, Alimonta y Tuckett e Sella
Es un paraíso para la escalada, con prestigiosas vías, y para el recorrido de ferratas, algunas muy complejas. Además de una zona preparada para el senderismo de todos los niveles: desde los valles salen sentieros numerados y bien señalizados que llegan a refugios y pasos. Atravesando el macizo y con el apoyo de refugios centenarios, se ha diseñado un sendero de largo recorrido (Dolomiti di Brenta Trek) y una ruta ciclista (Dolomiti di Brenta Bike).
Refugios Brentei, Alimonta y Tuckett e Sella
Inicio: Refugio de Vallesinella (Madonna de Campiglio, 1513 m). Rutas: 317, 318, 328. Desnivel: 1475 m. Tiempo en marcha: 5.5 h. Distancia: 18.2 km.
Aunque es agosto, a las siete de la mañana hay 5 grados en el parking de Vallesinella, a donde llegamos con decenas de senderistas y ferratistas. Pasamos al lado de las señales que indican la dirección hacia el refugio Casinei y descendemos para cruzar un puente de madera sobre el torrente de agua. Esta zona es especialmente abundante en arroyos y cascadas. Seguimos el sendero 317 por el bosque de pinos. El suelo está embarrado y han colocado maderos y troncos formando escalones que nos ayudan a ascender en zigzag, hasta alcanzar el refugio Casinei (1826 m). Es pronto pero ya hay gente desayunando. En este punto hay varias desviaciones, nos aseguramos de coger la ruta 318 al Refugio Brentei.
La senda asciende por el bosque y los pinos dejan paso a arbustos más bajos. A 2043 m encontramos el cruce al Refugio Tuckett, por el Sentiero del Fridolin, a la vuelta lo seguiremos. Continuamos por la 318, que va cogiendo altura a la sombra, mientras el sol ilumina la vertiente opuesta del valle de Brenta. Cuando desaparece la vegetación, el sendero talla el roquedo y se hace aéreo, permaneciendo en la umbría. La luz de la mañana se la llevan la Cima Tosa y el Crozzon de Brenta.
El sol ilumina la Cima Tosa y el Crozzon de Brenta,
sobre el valle de Brenta.
La senda baja y sube suavemente, más adelante se abre paso en la piedra atravesando un túnel artificial, para continuar entre dos murallas rocosas. A la salida hay una placa que indica que estamos en el Sentiero Bogani.
El sentiero Bogani atravesando la roca
La traza flanquea la pared, pegada a ella, aérea y a ratos muy estrecha. Hay un tramo con cable, después atravesamos un nevero, tras esperar turno para dejar paso a las personas que descienden. Cada vez más cercana, las miradas son para la impresionante forma del Crozzon de Brenta.
Nevero permanente en el Sentiero Bogani
Cima Tosa y Crozzon de Brenta, desde el Sentiero Bogani
Se abre una explanada herbosa; en el borde se distingue el Refugio Maria y Alberto ai Brentei (2182 m), rodeado de paredes y cresteríos recortados.
Subiendo por el Sentiero Bogani
Refugio María e Alberto ai Brentei.
Detrás Cima Tossa y el Crozzon de Brenta
El refugio está muy animado. Es un punto de reunión y partida para algunas de las vías de escalada y ferratas más prestigiosas de los Dolomitas. También acoge a senderistas que se desplazan de refugio en refugio. Después de un pequeño descanso reanudamos la marcha, en dirección al refugio de Alimonta. Subimos por un caos de bloques alojados en un gran circo, bajo las murallas de Punte de Campiglio y Cima Mandron, que preceden a Cima Brenta. Al NE un grupo se dirige al inicio de la Ferrata Sosat, les vemos entrar en la grieta de acceso y progresar poco después hacia las estrechas terrazas que bordean la muralla por encima de 2200 m. Se mueven ágilmente flanqueando un tramo de la muralla, luego desaparecen; les llevará entre dos y tres horas recorrer la pared y salir en la Boca del Tuckett.
Subiendo al refugio de Alimonta desde el Brentei
Murallas en la subida al refugio Alimonta
Por la grieta sobre la pedrera se accede a la ferrata Sosat
Apenas perceptibles, dos montañeros inician la ferrata Sosat
Las dos torres de Ei Gemelli y la Torre de Brenta
Torre de Brenta
Los cables de la tirolina indican la proximidad del refugio.
Al fondo, Cime degli Armi y vedretta de Sfulmini
Finalmente, la traza entra en una gran explanada cárstica con grietas y pequeñas terrazas, rodeada de murallas, torres y agujas. Al fondo una pequeña pala de nieve, es lo que queda del glaciar Sfulmini (vedretta de Sfulmini). En una esquina está el Refugio Alimonta (2580 m) y su campana.
Refugio Alimonta (2580 m),
el más alto de los Dolomitas de Brenta
En la explanada cárstica
Cime degli Armi, vedretta de Sfulmini, Torre de Brenta
Ahora nos dirigimos al refugio Tuckett e Sella. Desandamos el camino, pasamos de nuevo por el Brentei y llegamos hasta el cruce con el Sentiero del Fridolin (2043 m, ruta 328). Nos desviamos atravesando un tramo de grandes y abombadas lajas, muy gastadas por el paso de caminantes. Ascendemos entre vegetación. Pronto aparece el cresterío de torres escalonadas del Castelleto Superiore, y las formas incisivas y elegantes del Campanile de Vallesinella.
De vuelta, nos cruzamos con los que suben a Alimonta
Refugio Brentei, al mediodía
Sentiero Bogani
Sentiero Fridolin, asoma el Castelleto Superiore
Sentiero del Fridolin
El sendero atraviesa un gran caos de bloques hasta llegar al grupo de edificios que acompañan al refugio Tuckett e Sella (2275 m), bajo las murallas del Castelleto Superiore. Está abarrotado: hay gente comiendo en la terraza, gente preparándose para salir hacia la Boca de Tuckett, gente cantando en una capilla próxima, ..
Entre el caos de rocas, bajo el Castelletto Superiore
Refugio Tuckett e Sella
Castelletto Superiore y Refugio Tuckett e Sella
Nos sentamos mirando hacia el circo de murallas. Al fondo destacan las agujas del Campanile Vallesinella y la Cima Sella. Bajo la Boca de Tuckett, queda una gran pala de nieve por la que suben y bajan con paciencia grupos de gente. Las cimas más altas permanecen escondidas en la niebla. Hacia el sur, seguimos los movimientos en la Ferrata de Sosat, en ambas direcciones se recorren gradas y pasillos colgados, subiendo y bajando por paredes y escalones.
Cima Sella, Campanile Vallesinella y Boca de Tuckett
Ferrata Sosat, entre bloques y terrazas
Para terminar la ruta, bajamos por el marcado sendero 317 hasta el refugio Casinei, siguiendo a la procesión de familias que han llegado hasta el Tuckett. El camino es evidente y esta vez recorre praderías y bosques, antes de alcanzar el Casinei. Desde allí continuamos el descenso hasta el parking y refugio de Vallesinella. Por encima del aparcamiento, entre nubes, asoman los cresteríos recortados de Brenta.
Refugio Casinei
Parking de Vallesinella
http://mujeresdepyrenaica.blogspot.com.es/2014/11/ruta-circular-al-refugio-xii-apostoli.html
Grupo Brenta
Dolomitas de Brenta
3 comentarios:
Hola Luisa,
este recorrido me trae muy buenos recuerdos de las vacaciones del año pasado. Hicimos la Ferrata Sossat pasando primero por Tuckett y acabando en Brentei. Partimos desde el teleférico de Madonna de Campiglio...Bonita excursión y grandes paisajes...Preciosos Dolomitas de Brenta...
Sosat es una ferrata muy visitada y prestigiosa. El macizo tiene mucha tradición en ferratas. La tercera semana de agosto solo hubo dos días soleados e hizo mucho frío. Aprovechamos para recorrer senderos pasando por refugios a más de dos mil metros, en ruta circular cuando era posible.
Lo conocí, hace años, espero volver con las mujeres de Elgoibar. Buenas ideas.
Gracias Luisa.
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