jueves, 6 de febrero de 2020

Sendero con nombre de mujer: PR Micaela Portilla Ibilbidea - Esther Merino


Senda Micaela Portilla, Condado de Treviño (Burgos), en territorio alavés. Sin contaminación ni industria, andar por caminos de arrieros es ahora todo un acto de rebeldía, entre campos de labranza y sin cobertura ni cronómetro, en despoblados medievales por peste y guerras, por la ruta del vino y el pescado (GR38). 

La vuelta a la naturaleza sin prisas y disfrutando cada rincón, redescubriendo caminos de antaño que han perdurado hasta nuestros días. El símbolo del arbolito dibujado nos va a acompañar en todo el trayecto, junto con explicaciones de cada lugar. Se recorren paisajes especialmente queridos por Micaela, historiadora, antropóloga, escritora y defensora del patrimonio alavés.




PR Micaela Portilla: 16.31 km, trazado circular, 5 h, desnivel positivo: 430 m.

¿Qué nos vamos a encontrar en esta bonita senda? Un PR circular, las cuevas de Laño y Santorkaria, el bosque y pueblo de Laño, la ermita de Nuestra Señora de la Peña dentro de una roca en Faido, las cuevas de San Miguel, una cantera abandonada de arena blanca y el despoblado de Granados con ermita románica llena de leyendas.

Tiene tantos rinconcitos esta ruta que merece la pena detenerse en cada uno dedicándole todo el tiempo necesario incluso en varias jornadas. Es una ruta para hacer sin prisas, una vuelta al caminar clásico. Como decía Robert Moor en su libro En los senderos: “El camino es de quien lo hace”. Hay caminos longevos, que persisten con sabiduría porque conectan y llegan a algo. Los caminos sencillos liberan la mente, avanzan sin contratiempos ni equivocaciones, nos permiten observar con calma la naturaleza.


Iniciamos el recorrido en la ermita de Ntra Sra de la Peña en Faido: dentro de una oquedad y llena de recovecos, con cuevas artificiales del s. VI.


En ellas aparecen dibujos simbólicos en forma de árbol, al parecer se realizaban para ejercer influencia bienhechora sobre el difunto. Es el símbolo de nuestro PR.


Nos entretenemos en sus cuevas y rincones, de visita libre. Es la iglesia cristiana más antigua del país vasco, declarada Monumento Nacional de Euskadi. En el municipio de Peñacerrada – Urizaharra (739 m).


Para entrar dentro de la iglesia hay que pedir cita al teléfono 945 101 070, tal como pone en los carteles informativos, pero hay rinconcitos que son libres de visitar.

       Cueva sobre el tejado de la ermita.

Frente a la ermita están las cuevas de San Miguel, menos visitadas y escondidas, quizá más auténticas por pasar desapercibidas y más aisladas. Nos ayudamos de una escalerita para subir.


Continuamos la ruta desde el tejado mismo de la ermita, en un recorrido muy curioso y diferente a cualquier otro. Vamos en dirección a las canteras de arena blanca, a través de un bosque.
       Tejado de la ermita donde continua el PR por el sendero señalizado.

Este rincón nos sorprende gratamente porque sus formaciones nos recuerda a la Bárdenas. Un bonito paisaje lunar que el tiempo y la lluvia ha modelado.


Disfrutamos caminando por estas dunas con formas caprichosas, en estas canteras se han encontrado restos arqueológicos de dinosaurios.


Unas escaleras de madera nos ayudan a bajar o subir a las canteras o la Capadocia de Treviño. En este momento hay un escalón roto por eso lo han precintado pero no impide el trayecto.


Cuevas rupestres de Laño y Santorkaria: en el siglo VII eran viviendas, posterior centro religioso eremita s. IX y s. X y más adelante se aprovechó su interior como cementerio para enterramientos excavando tumbas. Una vez olvidadas en el s. XVI las cuevas fueron establos para el ganado. Jose Miguel Barandiarán fue el primero que estudió las cuevas de Faido y Laño en 1917.


Ambas se encuentran a cada lado de la carretera. En las Cuevas de Laño hay una ligeramente más apartada del resto: La cueva de la Dotora. Cuentan las leyendas que vivió la última mujer de la comunidad en la edad media, otros dicen que fue habitada por una mujer de Laño hasta final de sus días. Son muy inspiradoras y realmente interesantes con explicaciones de cómo vivían allí, numerosas y en buen estado, la imaginación hace el resto.


      Cuevas de Santorkaria, frente a las cuevas de Laño.



      Sepulturas antropomorfas bien talladas.   

Al llegar a Albaina hay un centro social donde podemos tomar unas cervezas. Seguimos nuestro camino por pista hacia la ermita románica de Granados. Antiguo templo parroquial del despoblado que se cree desapareció por el cólera. Los motivos de la despoblación son varios. En la Edad Media el principal azote eran la guerra, el hambre y las epidemias de peste que acababan con el vecindario entero. La peste negra en 1348 y la segunda epidemia más mortífera en 1348 diezmó la población.



 “La gente corre tanto
porque no sabe dónde va,
el que sabe a dónde va,
va despacio,
para paladear al ir llegando”… Gloria Fuertes

Nota: Condado de Treviño, territorio burgalés, enclave histórico, situado en el corazón de la provincia de Álava, a pocos kilómetros de su capital, Vitoria. Esta isla burgalesa tiene su origen en los conflictos bélicos entre los reinos de Castilla y Navarra allá por el siglo XII (entre los reyes Alfonso VIII de Castilla y Sancho el Sabio de Navarra). Geográficamente, limita con la mayor parte de las comarcas naturales de Álava, como son la Llanada Alavesa por el norte, los Valles Alaveses por el oeste y la Montaña Alavesa por el sur y el este. Son conocidas las leyendas del misterioso pueblo de Otxate sobre fantasmas.

Biografía de Micaela Portilla 1922-2005 Vitoria: fue una de las historiadoras, antropólogas y pedagogas vascas más importantes del siglo XX defendiendo el patrimonio alavés ante la ignorancia de la época. Autora de gran cantidad de estudios y publicaciones, cabe resaltar su carácter pedagógico, que compaginó con el de investigadora y divulgadora sus intervenciones siempre llenas de entusiasmo, hechas tanto en salas de confortables butacas como en humildes escuelas de aldea o a pie de autobús. Eran magníficas sus explicaciones sobre caminos añejos (muy importantes en la obra de Micaela), sobre ermitas todavía en pie o desaparecidas, sobre canteros o tallistas, sobre linajes. Había una sabiduría grande y un don especial para explicar todas esas noticias a la gente, con un sentido pedagógico incomparable.  Profesora de escuelas durante 43 años, estudió Magisterio y Filosofía y Letras y catedrática de Escuelas Universitarias del Profesorado en Cádiz, Vitoria y Madrid. Gran apasionada de la historia y el arte, conferenciante, colaboradora de prensa y participante en coloquios y congresos, un centenar de publicaciones. Primera mujer nombrada Doctora Honoris Causa por la Universidad del País Vasco

1 comentario:

Esther Merino dijo...

Gracias M Cruz por mandarme tus fotos de la ruta y que te haya gustado tanto como a mí. De eso se trata, de dar a conocer estas bonitas rutas.