viernes, 16 de noviembre de 2012

El Bosque de Artikutza - Joana García Romero






Nunca había penetrado en un bosque de similares características y nunca habría llegado a imaginar que podía existir un lugar así. La primera vez que lo visité, el otoño tímidamente despuntaba y las nieblas se nos echaron encima pocos kilómetros antes de llegar de nuevo a Eskas (casa del guarda), lugar donde se puede dejar el coche. Miraba hacia todas partes esperando encontrarme con algún Elfo.... -es que tiene que haber Elfos por aquí, no creo que vivan en otro lugar!!! Pensaba hacia mis adentros. Recuerdo haber visto ponis enanos salir de entre las brumas y yo quedarme atónita, no podía creer que existiera una raza de caballos más pequeña todavía. 

Geográficamente Artikutza está situada en territorio de Goizueta, siendo propiedad del Ayuntamiento de Donostia, su extensión es de 37000 Ha. Se puede decir que es el lugar donde más llueve de toda la Península y con más antigüedad de Euskalerria. Podemos acceder en coche hasta el poblado o barrio de Artikutza pidiendo un permiso especial en el servicio de Udalinfo del Ayuntamiento, si es que queremos llegar hasta allí en vehículo, algo nada recomendable pues lo mejor es dejarlo en el aparcamiento de Eskas y continuar a pie para poder disfrutar de ese formidable bosque que nos dejará, sin lugar a dudas, más que impresionados. 

Por los restos que se han encontrado se sabe que Artikutza fue habitada en tiempos prehistóricos, concretamente en las cuevas de Aitzbitarte (Errenteria) y la de Torre (Oiartzun). Existen también, como testigos de antiguos poblados, numerosos dólmenes, cromlechs y túmulos. 

En el siglo XIV su bosque fue sometido a explotación, actividad que tuvo gran influencia en el entorno ya que se usaban grandes cantidades de madera (6 toneladas) que se convertía en carbón para conseguir una sola de hierro. Evidentemente ese ritmo no auguraba una larga vida al bosque, sino más bien lo contrario, y dándose cuenta de ese detalle, idearon un sistema de conseguir la madera mucho más sostenible: podar los árboles aún jóvenes favoreciendo de esta manera unos troncos más cortos y gruesos de los que nacían numerosas ramas y de éstas, era de donde se iban abastenciendo (Hayas trasmochas). Gracias a este sistema el bosque ha sobrevivido a su intensa explotación. Podemos encontrar todavía numerosos vestigios del pasado minero de la zona, como el tren que llegaba hasta el mismo puerto de Pasaia. 

Artikutza es un lugar declarado de Interés Comunitario (LIC) por la gran riqueza natural que alberga. 

Esta vez no puedo publicar fotografías como en otras entradas he hecho, no trasmiten la emoción que se puede llegar a sentir paseando en ese lugar tan maravilloso y la mejor manera de hacerlo es compartiendo en un audiovisual las horas que destinamos a retratar solo un pequeño pedacito de aquello, porque Artikutza en su extensión, alberga pistas, caminos, senderos, canales y secretos, secretos que sólo son revelados a quien se deja llevar por el susurro de su corazón. 

Ponedlo a pantalla completa, elegid la opción HD y sentid la magia de Artikutza.


2 comentarios:

Miren Muñoz dijo...

¡qué bonito!, verdaderamente las imágenes y la música te trasladan durante ese espacio de tiempo a las sensaciones únicas que produce el entorno de un bosque...Artikutza es único...

JOANA GARCÍA dijo...

Tienes razón Miren, Artikutza es único. Siempre que he ido me ha sorprendido, da igual la estación.
Un saludo.