Aunque llevamos una temporada de un tiempo invernal en otoño, ¡bienvenido! pues está nevando en la alta montaña y eso es buena noticia para la temporada de esquí. Miramos mucho la meteo, especialmente Euskalmet o Metero Consult, y el miercoles 24 interpretamos que podría haber una ventana de calma. Formo parte de un grupo de veteranos jubiladas/os, ya "sesentones" que practicamos el montañismo desde juveniles y, aunque siempre hemos tenido relación deportiva, ahora salimos todas la semanas, para mantener la afición con pasión.
Puede parecer mentira pero, a pesar de tanto caminar por tantos relieves y especialmente por la de Euskal Herria, aún podemos trazar en el mapa rutas originales. El GPS es también una gran ayuda para aventurarnos en la red laberíntica de senderos, pistas y caminos de nuestro humanizado relieve, y llevar a buen fin la travesía.
El miércoles 24 de noviembre no paró de llover en Euskadi y, sin embargo, en Lapurdi, con la lluvia en los talones, salió un día frío pero despejado y con sol... ¡Milagro!... pues aunque nadie se lo crea, así fue.
El miércoles 24 de noviembre no paró de llover en Euskadi y, sin embargo, en Lapurdi, con la lluvia en los talones, salió un día frío pero despejado y con sol... ¡Milagro!... pues aunque nadie se lo crea, así fue.
La excursión montañera me atrevo a llamarla "Alrededor del Arranomendi-Mondarrain", la montaña más representativa de este sector vasco situado en el eje de un valle con diferentes cordales montañosos, que nacen desde diferentes puntos del territorio de Lapurdi. Ainhoa, Itsasu o col de Pinodieta pueden ser puntos de salida y escogimos la original partida de Pinodieta. Realmente es la vuelta a un valle anónimo. Por allí discurre el GR8, un desconocido gran recorrido. Pero nosotros fuimos a las alturas. Existen unos circuitos locales señalizados y con marcas amarillas que pueden ayudar, pero debe ser la gente montañera con su intuición quien debe marcar el itinerario. Desde el principio ascendimos hacia la primera cima, el Erebi (583 m), pero rodeándolo por el NO, para visitar la capilla de Aubepine y el calvario, y desde allí con fuerte pendiente pisamos la primera cumbre. Después por el precioso cordal cimero, fantástico, herboso, gran mirador hacia todos los rumbos, pisamos el Atxulegi (617 m), montaña mas erguida y picuda que el Erebi. Y después, con un diente de sierra, llegamos tras superar el col de "Trois Croix" por pista de montaña buena, hasta el col de Zuharreteako, por donde discurre la travesía transpirenaica GR 10. El recorrido es un circuito "en bucle" y el siguiente paso es ir cerrándolo. Ahora dirigimos nuestros pasos al Sur, con dos posibilidades, la preciosa ascensión al gigante de la zona, el Arranomendi o Mondarrain (749 m), o bien rodearlo por un sabio sendero pastoril, que nosotros elegimos, porque el Mondarrain en nuestra larga vida montañera lo habremos ascendido más de una decena de veces.
Es una vueltona preciosa y en el col del Amezketa, bajo el piramidal aunque modesto Eskondray, fuimos en busca de las afamadas colinas de Iparralde, por caminos balizados con la banda amarilla e indicadores de "etxealdeen itzulia". Llegamos al entronque con el GR8, y por escenarios bucólicos, de verdes praderas y bosques autóctonos, con numerosos caseríos enriqueciendo el lienzo. Cerramos la ruta en el col de Pinodieta, donde habíamos partido al amanecer...Ah...bajaban las aguas de las errekas como pocas veces hemos conocido, para atravesarlas, no nos quedó mas que dos soluciones...Hacer malabarismo o mojarnos....
En resumen: 17 km, 5 h sin paradas y 1005 m de desnivel acumulado. Hasta el proximo miercoles. Pero antes, el domingo, tenemos otra aventura. Intentaré contárosla...
mendikat: mondarrain/arranomendi
mendikat: erebi
mendikat: atxulegi
Mari González
Montañeros del Antiguo-San Sebastián
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